jueves, 3 de noviembre de 2011

despedida



















No me dejes ahora
con las manos vacías.
No me dejes así,
perdida, otra vez, entre las sombras...
Pero no digo nada,
sonrío,
acaricio tu cara,
nos decimos adiós,
vuelvo sobre mis pasos, tarareo
una canción de amor,
y después me repito
una a una
tus palabras
y tengo menos frío en el camino.

9 comentarios:

Antonio M. dijo...

¡Guau!

No dejes de escribir,
aunque sea con rima.

;-)

Llanos Guillén dijo...

No puedo no escribir, aunque me salga rima ;-)
Un abrazo!

Paula Martínez dijo...

¿Qué tiene de malo la rima?
Precioso, entra por los ojos, por el oído y sale por la piel.
Un beso.

Llanos Guillén dijo...

Lo de la rima es una broma, Paula, que viene de los haiku y de su no-rima :)
Me ha encantado tu comentario, parece el proceso de creación. Un abrazo!

ceanjo dijo...

¡qué sencillo!, ¡qué tierno!,¡qué precioso!

Paula Martínez dijo...

Ahora lo pillo ;)

Llanos Guillén dijo...

Sencillo como la vida, cuando no nos da por hacerle tirabuzones ;) Gracias, Ceanjo.

Anónimo dijo...

Me encantaaaaaaa
Rubia

Llanos Guillén dijo...

Gracias, so Rubia! ;) Un abrazo!